.

Madrugamos. Esta es la vista desde nuestra habitación en la pension Iberica, en la praca Figueira de Lisboa. A las siete y media de la mañana solo se ve alguna persona andando y los repartidores. En cambio anoche a eso de la una de la madrugada la plaza tenía «vidilla». Algunos grupos de turitas de un lado hacia otro, algun golpeado, los taxis y alguna puta frecuentaban el lugar.

.

La noche anterior dormimos en los bomberos voluntarios de Lisboa. Solo pudimos hacer una noche y tuvimos que encontrar una pension cerca. Pero la amabilidad por parte de los bomberos fue buena y nos dejaron guardar las bicis. Esta mañana fuimos a recogerlas. Chema acompaño a Cris al autobus hacia Sevilla y al regresar desayunamos los tres.

.

Salimos de Lisboa a través del bicicarril que une el embarcadero con Belem. Son cerca de siete kilómetros de carril junto al Tajo. A partir de Belem la cosa se complica porque hay dos opciones. Una es la de seguir por un camino arenoso y la otra es la de transitar por la calzada. Al principio cogemos un sendero que va entre la linea de agua y el ferrocarril pero tiene piedras y arena y dificulta el paso así que optamos por salir a la carretera. Tiene mucho trafico y un carril estrecho. Es sabado y no se ve mucho trafico pero no podemos imaginar lo que puede ser esto entre semana.

.

.

.

De Estoril a Cascais por la carretera. Hacemos un alto en el camino para pegarnos un chapuzon pero a pesar de la imagen el agua esta fría y según Chema no esta que digamos «muy limpia».

Del baño hacia el parque de bomberos de Alcabideche donde comemos a un  precio económico.

.

Comer…

.

.. y dormir.

.

Seguimos ruta hacia Sintra, patrimonio de la humanidad. Al llegar lo primero que localizamos es el parque de bomberos que colaboran y nos dejan un salon donde tender el saco.

Podemos decir que hoy es la primera vez que vemos in situ el ajetreo en un parque de bomberos. Por megafonia una voz dispara frases y pronto comienzan a escucharse las sirenas. Así una y otra vez. Un buen rato después un voluntario nos dice que son tres los fuegos. El más cercano en la misma Sierra de Sintra.  A partir de entonces y hasta la una de la noche no vemos regresar a ningun camión ni coche de apoyo.

.

.

.