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Hemos pasado la noche en el albergue de peregrinos de Soto de Luiña. Hemos sido los últimos en levantarnos. Lo hemos hecho para asegurarnos que no molestabamos a nadie. Al llegar de las fiestas del pueblo tuvimos que pasar sorteando colchonetas. A última hora de la tarde llego un grupo de más de veinte peregrinos de Polonia. Algunos venían arrastrando los pies. Otros venian con la sonrisa puesta y otros  arrastrando los pies con la sonrisa puesta.

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A las cinco de la mañana  comenzaron a levantarse los más madrugadores. Yo temía que el patrullon de peregrinos de distintas nacionalidades se hubiesen puesto de acuerdo para dar una misa con alegres canciones que acabasen con mis pesadillas y verme forzado a levantarme. Pero no ocurrio nada de eso y tuve que seguir durmiendo. Sin forzar.

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Cudillero. Que deciros de Cudillero!! pues que es un pequeño pueblo pesquero y pintoresco que ahora esta un poco saturado por oleadas de turistas que llegan a gastarse el dinero es sus restaurantes y comprar algun recuerdo en las tiendillas olvidandose de que el sitio merece la pena algo máss que para eso. Y es que afortunadamente no ví muchos «turistas» subir a los miradores. Este es uno de los pueblos mas bellos de España. A mi me gusta pero la cantidad de turistas le quita un poco de todo. Ocurre lo mismo que en Santillana de Mar. Pero en este último descubrí que la historia esta en salir a pasear de noche, cuando los turistas han regresado a sus hogares en otras ciudades o quizás a Santander. O eso o madrugar, una de dos.

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Nos hemos alejado un poco de l costa y hemos visitado Aviles. A las cuatro de la tarde la ciudad parecía dormida. No se veía a casi nadie. Recorrimos un par de calles y salimos hacia Gijon por la carretera antigua

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