Escribo porque todavía sin rodar ya estoy montado en la bicicleta. Hemos llegado hace una hora a casa. Cris duerme, y mucha gente duerme pero yo no puedo. Suele ocurrir que cada vez que preparo una aventura de esta envergadura me cuesta conciliar el sueño. Entonces es el momento de escribir.

Hoy ha sido un día «duro». Estres, organización, preparativos, contestar a e-mails, el movil… se suponia que la tarde nos la ibamos a tomar para «nosotros dos» pero que va. Imposible. Más liados que un ovillo de lana.

Pero tengo que admitir que el hecho de ponerme a hacer las cosas con antelación ha provocado que el carro (mi equipaje) estuviese listo al final de la noche y no a altas horas de la madrugada como acostumbro.  Pero de poco ha servido porque si no es por el equipaje es por escribir. La cuestión es dormir cuando uno no puede más.

Mañana inicio una nueva aventura que esperamos que sirva entre otras cosas para que la gente una bici y buen rollo. Si es así nos daremos por satisfechos. Y después de muchos kilómetros ahora me enfrento a un reto interesante, vivir y convivir en una aventura de muchos días y kilómetros con la persona con la que vivo. Ella sigue durmiendo. Ajena a que en menos de 6 horas y media estaremos dando vueltas por toda la casa.

El carro duerme en la terraza junto a «nuestras amigas». Cris ha dejado las alforjas listas y yo tengo el carro lleno, demasiado lleno. Solo falta meter el ordenata, las camaras y sus cargadores y poco más.

Por suerte han descendido un poco las temperaturas. Durante los días pasado el termometro superaba con creces los 30 grados. Alguno dira que eso no es nada comparado con los 48 que ha hecho en Toledo. Pero sí, algo sí que es. El problema para gente como yo acostumbrado a un calor más seco es la humedad. La sensación de tener que ducharse cada poco tiempo. La sensación térmica es que hace bastante más calor. De todas formas como os he dicho, la temperatura ha descendido y eso nos viene bien porque mañana nos acercamos a Tabernas.

Ahora voy a dejarme llevar por los sueños.