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Hoy me he levantado jodido. Mi garganta esta mal y mi pecho sufre. Aún así hay que continuar camino. Desayune en casa de mis tios, me despedi de mi prima María y de Antonio y Maria Jesús y pille el metro… el de la otra línea. Y claro llegue tarde.
Después de enlazar con el resto (todos desperdigados por distintas casas de Getxo) salimos hacia Plentzia.
La carretera tiene poco trafico hoy y es un sube y baja constante que mina, sobre todo las fuerzas de Sandra y las mias.
Llegamos a Bakio y viendo que andaremos justos para ver la Ermita de Gastelugatxe y el cabo Matxitxakonos quedamos a dormir en Bakio.
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Muy buenas compañeros del pedal:
Ya veo que el que conto la verdad el otro dia en la radio Euskadi, es siempre el mismo, mi primo, una maquina de pedalear. Tomar ejemplo de su esperiencia. Un verdadero pionero del Cicloturismo Bilbaino, bueno en mayusculas: UN PIONERO DEL CICLOTURISMO BILBAINO. De el teneis que tomar nota, siendo un ejemplo para vosotros. Sus ciento diez kilometros de paseo turistico camino de Sevilla con la caloó que pegaba y mis ciento diez kilometros como sindicato del pedal que realice, son en total doscientos veinte kilometros que nos cascamos los dos, ni que fuese la vuelta ciclista a España. Lo pongo en letra para que parezca algo más.
Bueno compañeros nos vemos y parad un poco para almorzar y comer.
¡Hola!
Ya he visto que ayer al final llegastéis a Bakio… después del trayecto habréis comprendido mejor por qué no creía poder seguir por ahí, y menos hasta Bermeo. Quizás no son tantos km pero sin parar de subir y bajar. Hoy espero que os haya gustado San Juan de Gaztelugatxe, porque la subidita también es considerable, ja, ja…
Espero poder estar el domingo en Donosti, si no estaré en Vitoria para el tramo final.
¡Animo, que ya no os queda nada!