Ahora, cuando se aproximan estas fechas, las de Navidad y que tan poca gracia me hacen, tengo que alzar el vuelo. Estos días han sido el reencuentro con Caprichosa. Es verdad que la tenia un poco abandonada. Tal vez se sentía dolorida porque me vio como me dejaba llevar por la ilusion… por la Sirena.. Me llevo el corazón y poco la razón. Por fortuna “Caprichosa” es comprensible y al rato ya comenzamos a aventurarnos de nuevo por los caminos del Cabo de Gata. Mis últimos días en el Cabo han sido el hundimiento moral y solo Caprichosa y mis músculos me llevaban a otros sitios. Mi cabeza todavía seguía pensando en la Sirena pero las cuestas, los descensos me decían que había un después.

La noche, fresquita, los perros en la calle y los gatos en los tejados. Bebemos las cañas y se para el reloj. En Las Negras es una noche “especial”. Pregunto si es el acontecimiento del mes y me dice un local que es el acontecimiento del año y se descojona. Estar en el bar sirve para sociabilizar. De algunas cosas me acuerdo bien. Por ejemplo de las palabras de Malavida y otras del Gato que dijo “Mi padre se compro un barco y yo me cago en la mar”.

Sigo escribiendo cuando me viene la inspiración pero creo que estoy perdiendo el tiempo porque con poco empeño podría hacer un libro de entrevistas a estos personajes que pululan por este pueblo.

Me voy de Las Negras derrotado, nada que ver con aquella soleada mañana de hace casi dos meses. Durante esos días eleve el corazón hasta el cerro Negro, justo entre Las Negras y cala San Pedro (la cala de los hippies). Una vez arriba lo apoye en una roca pensando que la Sirena al verlo se alegraria. Una forma de decirla: “!Toma! …haz lo que debas”.

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Y ahora por estas fechas, hago justamente lo que no he hecho nunca: balance del año. Así como un contable pero sin calculadora. Puedo decir que este ha sido un año en el que he vivido y sentido muchas etapas. Y en casi todas la única presente ha sido Caprichosa. Y en esas siempre he estado contento, feliz. También lo he sido con La Sirena, no lo niego pero al final, por las razones que sean, la única que esta junto a mi ahora es Caprichosa. Con ella puedo ilusionarme, con la Sirena no.

” Caprichosa me mira con atención.Me ha visto caer de nuevo y sin embargo ahí esta ella. Salir con ella es volver a sentirme libre. Las cosas no suceden porque si. Vendí humo cuando no había leña. A veces también sucede que se tiene miedo a tomar decisiones, a ser responsable. O como decía un amigo… a asentar la cabeza.”

“La Sirena se despide del gato. El gato quiere nadar y la Sirena andar. El gato al agua y la sirena a la arena”

Martes 14/12/010

“Mientras Caprichosa me observaba mi cabeza se hacia muchas preguntas. Me atormentaban. Me preguntaba una y otra vez si la Sirena se sentía tan mal como yo o si sentía aliviada, si estaba tocada o de puta madre, me gustaría saber si esta dormida, si esta con otra persona, si ha comido bien o nada como yo, si esta cansada pero no puede dormir… me gustaría tener el poder para olvidarla ya mismo. El poder de gritarla… !me voy después de rendirme. me voy porque estoy tocado. Me voy porque me has hundido…!”.

Miercoles 15/12/010

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Me asomo a la terraza y observo que de golpe y porrazo la Navidad llega a Las Negras. Me da ganas de salir corriendo con Caprichosa y no parar hasta un lugar donde no la celebren. Pero me contengo. He dormido poco porque los fantasmas de la noche se han acercado a tocarme las pelotas. A uno que decía llamarse Cupido le he dado tantas ostias que al final he caído agotado. Y dormí.

Salgo a dar una vuelta y observo el regalo que me hubiera gustado recibir en Reyes. El faro de la librería del pueblo. Un faro que vi en verano. Lo observo como en la foto, mal. Así es como lo veo. Mal para regalármelo (no tiene sentido) y mal para que alguien me lo regale. De pronto me doy cuenta que solo mi madre y mi hermana se siguen molestando en regalarme algo por estas fechas. Aún así me viene la imagen de La Sirena y un regalo que no espero a mi regreso. Pero se que es un estúpido sueño y sigo mi descenso hasta la playa.

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El regalo que nunca será.

Jueves 16/12/010

Y que mejor cura de Desamor que reirte o al menos intentarlo. ¿Como? muy fácil. Si tienes unos colegas que saben que no te van a apoyar sino a darte caña pues pensé en hacerles la misma pregunta a todos y ver sus respuestas. Por ello la pregunta debía ser sencilla, directa, al alcance de estas mentes. Retener las respuestas y luego soltarlas todas a la vez en la cena…y claro paso lo que tenia que pasar. Que las risas invadieron la cena de la cuadrilla durante buena parte de ella.

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– Oscar, me ha dejado una chica– le digo. No dice nada y le doy algunos pasos de lo sucedido.

Este con el semblante serio me responde: — En las mujeres los cambio de opinion repentinos puede deberse a que alguna persona  ha influido en ella–.

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– Aitor, me ha dejado una chica.

Este también con el semblante serio. –Joder Arturo, lo que tienes que hacer con la siguiente es dejarla embarazada pronto– Me quedo sin palabras.

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– Miranda, me ha dejado una tia–.

–¿La de Almeria?

– Si, la misma– le respondo.

– ¿A que ciudad te vas a ir ahora?– También me quedo sin palabras.

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– Javi. Me ha dejado una chica.

– ¿Y cuanto tiempo llevabas con ella?

– Mes y medio–. Le respondo entre dientes

– Solooooooooooooooooooooooooo.

El “solo” se transforma en casi un grito que oye medio bar.

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Mi plimo Javi.

– Plimo estoy triste, me ha dejado una chica– le digo un poco acojonadillo.

– Déjate de tonterías. Tu eres un bohemio venido a menos, plimo, déjate de enamoramientos. La gente como tu esta de paso.  Sigue escribiendo

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– Luis… estoy de luto.

– Joder que ha pasado??–.

– Nada, que me ha dejado una tia–.

– Joder Arturo… ¿de que ostias vas?.

Después de un rato. — Arturo ten claro que las tias, todas, siempre viajan con un pasado. Cualquier cosa que haya pensado ha influido en esa decisión–.

Me quede pensando un rato. Mirando al techo como si alli habitasen las respuestas.

Otro rato después.  – Luis sabes tambien me mando un sms de esos que tanto nos gustan–

– Jajaja. Leemelo–

– “… bla bla bla… eres un tio estupendo… bla bla bla,.. que te vaya bien… que se cumplan todos tus sueños..”–

– Jajajja. Joder es que son la ostia. Lo que hay que hacer en estos casos es despacharse con el mismo mensaje añadiendo: …eres un chica estupenda, te iba a mandar el mensaje y te has adelantado”.

Pensé  que tenia razón solo que eso no me vino a la cabeza cuando recibí el sms de la Sirena.

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– Jose Mari, me ha dejado una tia.

– ¿Has pensado en enviarla a la tuna? o compra unas flores… eso siempre funciona.

Perplejo. Me quedo “a cuadros” con la respuesta.

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En fin sabia que acudir a mis amigos en estos momentos me haría sentirme mejor al menos por momentos. Ninguno de ellos me ha dado una palmada en el hombro. Ni lo esperaba. Sabia que para olvidarme de lo sucedido lo mejor era plantear algo así. De hecho no lo plantee como para dar pena sino para pasarlo bien un rato. Espero que alguno de vosotros sonría cuando lea esto.