«La gota»

La siento, la veo. Se escurre por mi frente. A veces llega hasta la barbilla. Otras se detiene en la punta de la nariz. Y justo la veo caer sobre el manillar, el cuadro o sobre el asfalto. No me da tiempo a hablar con ella. Se suicida sin miramientos.

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Desayunamos en el camping (del que no vamos a hacer publicidad por petición propia de la dueña y que si nos invito a pernoctar) y salimos hacia Motril. La carretera es la N 340 y durante unos cuantos kilómetros rodamos solos porque esta cortada al trafico. Un desprendimiento ha provocado el corte. Al llegar a el no nos queda más remedio que soltar las alforjas y el carro y pasarlo por encima de la piedras poco a poco. Un poco más adelante en  «Pozuelo» paramos a almorzar algo. Las vista antes de llegar al pueblo son curiosas porque esta rodeado de invernaderos y tan solo un espacio verde conecta con la playa Los invernaderos se atreven a llegar casi hasta la misma orilla del mediterraneo.

Seguimos ruta solo que ahora por la autovía. Nos sorprende una cuesta que nos jode más por el calor que por otra cosa. Aquí en 30 mt. puedes pasar de un lugar donde la brisa hace llevadero el día a vaciar el botellin y pedir auxilio a los santos padres.

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El día acaba con la victoria de España contra Holanda. A partir del final se desata la alegria.